150 años de alegría, ¡gracias Maín!

El viernes 13, Santa María Mazzarello, y el sábado 14 de mayo, fueron dos días de gran Fiesta Salesiana. Celebramos a Madre Mazzarello y los 150 años de la creación del Instituto de Hijas de María Auxiliadora.

La fiesta del viernes empezó con algo muy típico de Alicante, un pasacalle por nuestro barrio, el PAU 2. Una pancarta conmemorativa y un 150 de grandes dimensiones con música sobre un vehículo abrían el camino a los cientos de alumnos, acompañados por sus profesores. Salesianas, PAS y multitud de familias también nos acompañaron en esta experiencia única e inolvidable. Agradecemos también el cariño y ánimo de los vecinos, así como el servicio prestado por la Policía Local.

Una de las escenas más entrañables fue ver cómo los más mayores cuidaban de los más pequeños y bailaban juntos al son de la música. Todos a una, desplazándose juntos. El espíritu alegre de Maín siempre presente en su fiesta.

Durante el resto de la jornada se realizaron diferentes dinámicas y juegos ambientados en la gran efeméride. Y, cómo no, destacar también el partido de fútbol de alumnos contra profesores. Sin olvidar el refrigerio preparado para la ocasión: horchata y fartons.

Al día siguiente, sábado, la AMPA junto con el centro preparamos un día lleno de actividades. Comenzamos con una Eucaristía para dar gracias a Dios por Maín y por estos 150 años de las Salesianas. Alumnos y familias, profesores, salesianas y salesianos, franciscanas, antiguos alumnos… Todos invitados y bienvenidos.

A continuación, pequeños y no tan pequeños se lo pasaron bomba en las diferentes propuestas, destacando los hinchables, ¡había de todos los tamaños y tipos! Contamos también con una paraeta solidaria en beneficio de la ONGD Vides. Y para acompañar el calor: refrescos y empanadillas en nuestra cantina. Seguimos después con la paella para todos.

El día terminó con el concierto de Nico Montero, cantautor católico, que sorprendió y agradó a todos con sus enseñanzas, pues convirtió sus canciones en una catequesis maravillosa.

También los grupos de tiempo libre del colegio nos demostraron en un Escape Room cómo juntar a niños de diferentes edades y que estos disfrutaran jugando. El Club de Lectura acompañó a su vez a los más pequeños con una actividad de cuentacuentos. Una jornada de todos y para todos. ¡Gracias por la respuesta y participación!

Como decía nuestra querida Maín, «Que cada puntada sea un acto de amor a Dios». Seguimos, puntada a puntada haciendo familia, construyendo nuestra casa y escuela; seguimos realizando, entre todos, un gran bordado.

Equipo de Comunicación y AMPA