Transmitimos lo que vivimos

Enmarcados en el 150 aniversario de la fundación de nuestro instituto, el claustro de Salesianas Alicante ha comenzado el 2022 con una propuesta formativa y vivencial de los equipos de Pastoral: sesiones de interioridad.

El martes 18 de enero se realizó la primera sesión, en la que compartimos una dinámica en torno al símbolo del río Roverno de Mornese. No dejarse llevar por las corrientes del mundo, perdiendo nuestra esencia, nuestra valía. Como educadores debemos sacar a relucir los talentos de nuestros chavales, empoderarles y hacerles luchar por sus metas por muy difíciles y negras que veamos las cosas. Solo “rascando” veremos el verdadero interior de cada uno… Y es así como marcha nuestra escuela, siendo el motor de multitud de chavales que se han sentido queridos, valorados, que han notado que alguien rascaba un poquito más allá y encontraba el verdadero color en sus vidas.

Comenzamos realizando un recorrido muy divertido, dinámico y expresivo por el río Roverno. Tras el viaje, volvemos a la calma. Seguimos  en comunidad con una meditación guiada para verdaderamente tomar consciencia de: en qué lugar me encuentro, dónde me sitúo, si sigo hacia adelante sin arriesgar en el futuro y dejándome llevar a lo fácil o, verdaderamente lucho cada día y me encuentro en el lugar donde quiero estar.  Tras esta reflexión acabamos  “rascando” nuestro corazón, sacando todo el color que hay dentro de él y para ello hacemos el símil con una tarjeta negra de colores escondidos que finalmente guardaremos en la caja diseñada para nuestro claustro, tal como tienen nuestros alumnos en el aula.

Es importante tener experiencias y compartirlas, siendo testimonio para con nuestros chavales, acompañándolos en el crecimiento de camino de la vida. Por eso creemos que estas sesiones pueden significar para algunos la continuación y para otros el punto de partida de cara a las sesiones del proyecto de interioridad que se desarrolla dentro del Plan de Acción Tutorial, PAT. De la misma forma, el hecho de compartirlas como claustro nos hará estrechar vínculos como miembros de la gran familia que somos.

¿Te animas a acompañarnos?